Incertidumbre

    La ventaja de sentir incertidumbre respecto a su carrera

    Por: Ron Carucci, Dorie Clark y Tomas Chamorro-Premuzic

    En estos días, se habla mucho de la crisis de significado detonada por la pandemia y el ajuste de cuentas con lugares de trabajo tóxicos que tiene a muchos empleados abandonando sus compañías en masa. De hecho, una investigación reciente sugiere que más de la mitad de los estadounidenses están considerando un cambio de trabajo, porque sienten que sus empleadores no se interesan por sus preocupaciones, y quieren que la flexibilidad se convierta en un elemento permanente de sus vidas laborales. Algunos han sentido un repentino estallido de claridad sobre lo que quieren – o no – para el siguiente paso de su carrera.

    Pero ¿y si usted no lo sabe con certeza? ¿Qué tal si, más allá de su sensación general de malestar, está cargado con una sensación más profunda de incertidumbre sobre lo que quiere a continuación?

    Creemos que hay valor en este estado liminal de incertidumbre. He aquí cinco maneras de aprovechar el no saber qué sigue:

    DEJE QUE LO DESCONOCIDO LE ABRA POSIBILIDADES.

    No tener un destino específico en el que fijarse le permite dar un paso atrás y preguntarse sobre trayectorias profesionales que quizá nunca habría considerado. Piense en los momentos a lo largo de su carrera cuando sintió que estaba haciendo su mejor trabajo y se sentía más satisfecho. ¿En qué otros contextos podrían ser posibles esos momentos?

    APRENDA A LEER LAS SEÑALES CORRECTAS.

    La ambigüedad nos obliga a estar alerta. La clave es estar alerta curiosidad, no con miedo. Para muchos, la incertidumbre laboral y la ansiedad resultante conducen a opciones subóptimas. Temiendo nuestra obsolescencia, falta de empleabilidad o que estamos mal equipados para convencer a otros de nuestro valor, nos malbaratamos. Ignoramos las señales que podrían estar apuntándonos a algo aventurero y nos conformamos con algo familiar, aunque sea insatisfactorio.

    SEA FUNDACIONAL AL DEFINIR SU CARRERA.

    Realice un inventario de sus habilidades para garantizar la aplicación más amplia posible de aquello en lo que es bueno. También puede identificar las habilidades que desea desarrollar. Definir su futuro en términos de habilidades en lugar de trabajos ampliará su apertura. Pregúntese a usted mismo: ¿Hay áreas en las que necesita profundizar alguna habilidad?

    PERMITA QUE LA AMBIGÜEDAD LO HAGA MÁS ADAPTABLE.

    Nuestros instintos naturales son imponerle certidumbre a la ambigüedad para recuperar un sentido de control. ¿Y si, en cambio, se permitiera apoyarse en esa incomodidad? Al enfrentar la ambigüedad, debilita su agarre, haciendo que lo desconocido sea menos aterrador. Pregúntese: “¿Para qué me libera esta ambigüedad?” Cuando incrementa su adaptabilidad, se vuelve mucho más atractivo para futuros gerentes de contratación.

    APRENDA A VIVIR CON UN PROPÓSITO.

    En lugar de apuntar a un objetivo estrecho como “quiero comenzar mi propia práctica de consultoría” o uno vago como “quiero ayudar a la gente a vivir mejor”, considere lo que significaría vivir con un mayor propósito cada día. Vivir con propósito significa alinear sus elecciones diarias a un conjunto de valores y elegir, con base en esos valores, algunas opciones sobre otras.

    Dar forma al siguiente capítulo de su carrera merece todo el tiempo, cuidado y atención que pueda darle. No se resistas a la incertidumbre; abrácela.

    Ron Carucci, Dorie Clark y Tomas Chamorro-Premuzic

    Ron Carucci es cofundador y socio directivo en Navalent. Dorie Clark es autora de “The Long Game: How to Be a Long-Term Thinker in a Short-Term World.” Tomas Chamorro-Premuzic es jefe de innovación en ManpowerGroup.

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