Por: Julie Pham

Una propuesta de trabajo es un documento detallado, generalmente de tres a seis páginas, que describe por qué usted es una buena opción para un puesto. Se diferencia de una carta de presentación en que, por lo general, no forma parte de un proceso de solicitud formal. Más bien, es algo que escribe y comparte con el gerente de contratación, ya sea para poner un pie en la puerta o para asegurar un trabajo después de una ronda de entrevistas. También puede utilizar esta técnica si ya trabaja en una empresa y desea hacer una transición lateral, ser promovido o proponer un rol completamente nuevo.

Aunque puede parecer audaz e inverosímil, como alguien que ha escrito y recibido propuestas de candidatos para un puesto, he visto que esta estrategia funciona.

El propósito de una propuesta de trabajo es articular algunos detalles importantes sobre su candidatura:

— Por qué quiere el puesto

— Por qué tiene las habilidades y la experiencia para agregar valor

— Qué tan profundamente ha pensado en la organización, sus necesidades y cómo abordarlas

Por lo general, es mejor enviar una propuesta de trabajo después de haber conocido a alguien en la organización y haber reunido información sobre sus fortalezas, áreas de desafío y cualquier vacío que pueda llenar en el equipo.

Si ya llegó a la etapa de la entrevista, por ejemplo, está en buena forma. Puede usar sus conversaciones con los miembros del equipo y el gerente de contratación para obtener información. Haga preguntas como: ¿Cuáles son algunos de los desafíos que enfrenta su equipo en este momento? ¿Qué cree que está haciendo especialmente bien su equipo? ¿Qué habilidades cree que faltan en el equipo?

Después de sus entrevistas, use lo que ha aprendido para escribir una propuesta sólida y envíela junto con sus notas de agradecimiento. Esto indicará tanto su alto nivel de interés en la empresa como su disposición para asumir el trabajo.

Si ha solicitado un trabajo, pero cree que sus posibilidades de llegar a la etapa de la entrevista son bajas, aún puede usar una propuesta para fortalecer su solicitud, aunque requerirá un poco más de trabajo. En este caso, deberá encontrar una manera de hablar con alguien en la organización y hacer que su propuesta llegue a manos del gerente de contratación. Esto podría ser a través de un contacto que ya tenga en la empresa, por medio de un reclutador o a través de un empleado al que contacte para una entrevista informativa en LinkedIn.

Presentarse a sí mismo a través de una propuesta indica confianza. Demuestra que usted es alguien con opiniones propias. También obliga al gerente de contratación a decidir si está listo para incorporar a su equipo a alguien que sea asertivo y que tenga sus propias ideas. Algunos gerentes solo quieren contratar personas que hagan lo que se les dice, y algunos candidatos solo quieren un cheque de pago. Las propuestas no son para estos jefes o candidatos.

Las propuestas son para personas innovadoras que buscan trabajar con organizaciones igualmente abiertas para crear roles emocionantes, y aunque no siempre manifestarán el resultado que desea, hay momentos en que lo harán. Escribir una propuesta lo obligará a articular consigo mismo y con los demás por qué quiere este trabajo y por qué debería tenerlo. Eso es valioso, independientemente de lo que suceda después.